Historia / Referencias históricas



 

Fuente: La Hoja del Municipio de Haría nº 508

La sociedad ha evolucionado de una forma muy considerable, unas veces en positivo y otras en negativo, pero olvidemos lo negativo y vayamos a dar un repaso a los lugares en que se desenvolvían las luchadas antes, en el entorno más cercano.

Antes no había campos de lucha como hay ahora en todos los Municipios de la isla, pues la miseria y la precariedad económica no lo permitían, y así, digamos que las luchadas se hacían normalmente en las eras, pero también en otros lugares como rincones más anchos de las Calles, y otros que se acotaban en la mejor medida.

Como terreros de lucha se utilizaban antes en Haría, como de lo más antiguo que se recuerda, el espacio que estaba delante del Ayuntamiento de Haría, llamado Placita o Plaza de la Constitución, donde luego se construyó el denominado Aljibe del Pueblo, de la mano de Don Emilio Rodríguez Rodríguez, en los años de 1936-1937, por su cuenta, y en aquellos tiempos, las luchadas se hacían normalmente los domingos por la noche, y se alumbraba el campo mediante la quema continuada de unas gavillas de Ahulaga.

Otros espacios fueron utilizados como terreros, como el solar de Don José Socas Betancor, en la confluencia de las Calles de La Tegala y la Calle de La Cilla. También se utilizó mucho el solar de Don José Domingo Rodríguez Villalba en la Plaza de Haría, e incluso el espacio de verbena, que utilizó junto, Don Joaquín Rodríguez Villalba. También una era de Don Domingo Pérez Betancor, junto a la casa de Don Antonio López Socas. También fueron utilizadas algunas otras eras en la antigüedad.

Si nos situamos en Máguez, digamos que fueron utilizadas en especial, la era de Don José María Feo Barreto, en la Calle Luis Morote, como la más frecuente, la de Don Celedonio Figueroa Fernández, detrás de su casa, la de Don Antonio Barreto Feo, en la confluencia de las Calles Luis Morote y Era de Los Llanos. También fue utilizado para terrero, un espacio que había detrás de la antigua Ermita de Máguez, donde se encontraron Andrés Luzardo y Evaristo Perdomo a principio de los años de 1960. Pero donde más se luchó y más bien de último, fue en la verbena de la Sociedad de Máguez, pero es que además se llegó a luchar dentro del Salón de la propia Sociedad.

También se llevaron a cabo algunas luchadas en los pueblos de Mala, Punta Mujeres, Órzola, Ye y Arrieta, coincidiendo con sus celebraciones festivas, en los lugares más adecuados del momento.

De lo más antiguo de la lucha canaria en Lanzarote, es que se solía hacer dos selecciones o dos bandos de luchadores, dividiendo la isla en dos porciones bien diferenciadas, y así fue bastante importante la lengua de Volcán que llega a Tahiche desde la erupción ocurrida en Tao en el año de 1824, y se conocían por los bandos de la Vuelta de Abajo, y el Bando de la Vuelta de Arriba, y es que esta lengua de volcán, separaba o diferenciaba a los dos sectores o bandos de luchadores.

En aquellos tiempos hubo grandes hombres para defender su parcela, pero ya muy poco se recuerda de ellos, y menos mal que se ha ido escribiendo algún libro, y así se mantendrán para la historia, algunas proezas y hazañas de estos hombres de la tierra.