- Las Maretas -
Geografía/ Agua/ Datos interés
FUENTE: La cultura del agua en Lanzarote
Los términos mareta y aljibe no
siempre se diferencian
claramente, a veces se confunden
o resultan sinónimos. Se
reconoce que ambos, en la parte
excavada, utilizan el mismo
sistema, distinguiéndose por su
techumbre o dimensión. A veces,
sin
En origen, se construyen en zonas cuya topografía facilita la recogida o estancamiento de agua, tratándose de un legado del mundo aborigen las cuales se cercan con testes o muros de piedras hincadas. Podían mejorarse construyéndose obras de mampostería de arena, cal y piedras, con piso de piedra encalado o empedrado con rampa para dar de beber a los ganados. Como los aljibes, precisan de acogida, terreno o espacio que capte el agua pluvial. El patrimonio oral de Lanzarote lo nombra alcogida y por lo general en plural. Entendemos así que el término, en su origen, designa a un vaso de agua descubierto, grandes charcos rodeados de teste, como lo fueron las primeras maretas públicas que existieron. Posiblemente, con el tiempo, los mayores depósitos de propiedad privada que podían se fueran techando, tanto de obra fija o móvil, y se les consideraba como maretas. A principios del siglo XX Hernández-Pacheco reconocía que los aljibes cuando son de alguna extensión y descubiertos se llaman «maretas». Los documentos advierten que podían ser grandes o chicas, mareteja, maretilla o maretón
|

embargo,
no se diferencian pues hay
maretas cubiertas y sin cubrir,
grandes y pequeñas,
rectangulares o circulares...
Viera y Clavijo señaló que la
mareta era un depósito de agua
de cortas dimensiones, estanque
pequeño. Otros autores ofrecen
un mayor registro y reconocen
que posee diferentes
significados en el contexto
canario. Esta confusión se
observa también en las fuentes
documentales y en el patrimonio
oral. El conocimiento popular se
concreta y determina por zonas.
Por ejemplo, no se describe la
mareta de la misma manera en el
norte que en el sur de la isla.