Para efectuar un trasplante de PALMERA CANARIA con las mínimas garantías de éxito, es necesario:

1º.-Efectuar un riego profundo al pié de la palmera, con an­telación mínima de quince días, para ablandar el terreno y evitar en lo posible el desgarre de las raíces, favoreciendo el crecimiento de nuevas adventicias a su pié, abriendo una zanja a su alrededor que corte y aisle su actual enraizamiento.

2º.-Aislamiento a la luz del cogollo central de la copa, que se cubre con las exteriores, previo corte dado parcialmente en su nacimiento que facilita el abatirlas, atándolas a su alrededor y aún cubriendo todo con fardos.

3º.-En el trasplante al nuevo emplazamiento, mantener la misma orientación que tenía en su origen, para lo que previamente se deja en el tronco una señal indicando que cara miraba al nor­te.

4º.-Abrir el nuevo hoyo con antelación suficiente, un mínimo de diez días antes, y dejar en el fondo la tierra oxigenada que estaba en la superficie, enriquecida con estiércol, o mejor, con productos vitaminados que a tal efecto se vende.

5º.-Disponer de los medios mecánicos indispensables (Grúas), para que se efectúe el arranque y traslado sin traumas y golpes excesivos.