INTERÉS > Datos de interés > César Manrique
Desde que se situó
ya de fijo en Lanzarote, en
1967, el Artista lanzaroteño
César Manrique Cabrera, lo
primero que emprendió a nivel
particular, fue el iniciar unas
obras en una zona situada al
Naciente cercano de Los Jameos
del Agua, en el Malpaís de la
Corona, y así, junto con su
compañero de trabajo, el también
Artista Don Jesús Soto Morales,
cimentaron y empezaron a
levantar dos edificios contiguos
para vivienda de los dos, en una
zona denominada “Los Bonancibles”,
pero algunos Concejales del
Ayuntamiento de Haría, no vieron
bie
n
el hecho de que se construyera
por particulares en terreno
Municipal, y así, en un Pleno
extraordinario se denegó el
permiso para la construcción de
estos edificios. En el año de
1993, se quitaron los restos o
referencias de las dos
construcciones adosadas.
César Manrique Cabrera, a la vista de la negativa para poder construir en zona cercana a los Jameos del Agua, ya se fue buscando otro lugar donde ubicar su vivienda, y se centró en una zona de lava en el denominado Volcán en Tahiche, ocupando y acondicionando unas cuevas y otros espacios, que él denominó la Burbuja y que bautizó como “El Taro de Tahiche”, que le costara mucho trabajo, mucha dedicación, y empleo de mucho cariño, a una obra que deseaba culminar sobremanera, al reunir las condiciones que más a él le inspiraban, y así lo hizo y finalizó en el año de 1969 y enseguida la dedicó a su vivienda habitual, y ya en 1992, fue lo que luego se denominara “Fundación César Manrique”.
Una vez accedió a la Alcaldía de Haría, Juan José Santana de León, en 1971, César Manrique depositó su confianza en él, y así le encargó la búsqueda de algunas propiedades para comprar, y así adquirió un terreno en el Caserío de Guinate, de propiedad de Dámaso Betancor Betancor, que fuera antes de Otilia Barreto Barreto, con superficie de tres almudes, o 3.473 metros cuadrados, de lo que tuve el honor de hacerle la medición y el plano y hacerle la escritura privada. Acompañé una vez a Dámaso al Taro de Tahiche sobre la documentación y cobro, y como anécdota, le tenía mucho miedo a los perros que tenía César Manrique. También fui a ver la finca con José Juan Ramírez Marrero, su sucesor, para que la conociera directamente, y le di el plano de la finca. César Manrique, la compró con la intención de edificar una vivienda al borde de los Riscos de Guinate, con vista a los islotes, según versión de Juan José Santana de León.
Pero además compró a Salvador Perdomo Torres, inmediato al Complejo Polideportivo Municipal en Malpaso, un considerable terreno de vega, en que se hallaba enclavada una casa que perteneció a la propiedad del primer Médico de Haría y natural de Haría, Francisco Hernández Arata, (Conocido por Paco Fierro), que fue casado con María Cerdeña Bethencourt, y que fue vivienda habitual de esta familia, que tenía su entrada por la Calle de El Puente, luego nominada Elvira Sánchez. Por tanto es una vivienda histórica y además espaciosa y que además recuperara César desde un estado muy ruinoso en que se hallaba, y de la cual tenía unos bonitos proyectos, que se llevó consigo sin ejecutar totalmente, aunque sí ejecutó parcialmente, y de todas formas ya en el año de 1988 la dio por inaugurada y empezó a ser su vivienda habitual, y recibía a partir de ahí, infinidad de visitas importantes. La superficie de esta finca es de una Hectárea aproximadamente. (10.000 metros cuadrados).
