CULTURA:  Teatro

 

 

AÑO: 1990

 

Cuando se habla de teatro en Lanzarote habitualmente nos quejamos de que existen pocos grupos y que los que existen no tienen constancia en su trabajo. Generalmente, esperamos que las instituciones locales traigan grupos de teatro de fuera de la isla. No votante, cuando preguntamos si existe afición teatral en la isla afirmamos con rotundidad que sí.

No cabe duda que, en este sentido, Haría siempre ha jugado un papel importante con una gran afición teatral a través de la historia. Y esto no es casual. No olvidemos que en etapas pasadas, en las que la isla estaba muy vinculada a una economía fundamentalmente agrícola, la vida de los pueblos era mucho más rica e intensa, con una mayor población y, a pesar que el nivel cultural se desarrollaba con manifestaciones teatrales y musicales, sobre todo con la existencia de dos casinos: el Casino de Arriba (actual restaurante Los Baleos) y el Casino de Abajo (llamado también el Salón de Ginesa); en los que se centraban estas actividades. La existencia de estos dos casinos venía marcada por la posición socioeconómica de sus socios, que muchas veces rivalizaban.

El teatro se combinaba con las zarzuelas de obras traídas desde el exterior de la isla. Teatro de variedades, en el que se representaban obras teatrales cortas, entremeses, comedias y música, que formaba parte de cualquier programa de una sesión de teatro. También se realizaban obras de larga duración, divididas en tres actos, aunque éstas lo eran con menos frecuencia por las dificultades que presentaban. Todas ellas se presentaban con motivo de las fiestas del pueblo.

Además de las obras realizadas por personas del pueblo, esta actividad venía enriquecida con la llegada de algún grupo de teatro de otras partes de la isla. En Haría, don Enrique Curbelo, don Antonio López y, sobre todo, doña Encarnación Rodríguez, son nombres propios que han levantado y sostenido esta afición desde principios de siglo hasta la actualidad.

A partir de los años 70, y siempre a la sombra de doña Encarnación Rodríguez Lasso, surge el Grupo Teatral Guatifay, que protagonizará durante más de una década una intensa actividad teatral, tanto en actuaciones como en la organización de eventos teatrales que propician una mejora, tanto en la calidad de los montajes como en la infraestructura de los mismos. Este grupo comenzó como tal en el verano de 1976, con la comedia "La ciudad no es para mi",de Fernando Ángel Lozano, en Haría. A partir de esta obra, el Grupo de Teatro Guatifay realiza diversos montajes teatrales hasta bien avanzada la década de los 80. Obras como "Los Mendigos", de José Ruibal; "El Legado de Caín", del Living Theatre; adaptaciones teatrales, como "El Sueño", adaptación de las coplas de Víctor Fernández Gopar, o intentos de recuperación de nuestra historia, como es la obra "Triángulo de esclavitud en Toterroygatra", en el que se intenta sacar a la luz historia desde la Conquista hasta el siglo XX, son una pequeña aportación al mundo teatral conejero que se ha ido potenciando casi hasta la actualidad, en el que grupos como Ayacota de I.B. de Haría y los teatros que sigue ensayando la señora Encarnación Rodríguez hacen que la vida teatral se perpetúe en el tiempo y que Haría siga disfrutando del teatro que genera sus hijos, así como de todos aquellos grupos de teatro que asistan asiduamente a este pueblo que en estos días se prepara para celebrar sus fiestas patronales de San Juan, en las que, como es lógico, tendrá sus funciones de teatro.