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FUENTE: Naturalia Hispánica nº
22 - Año 1982
Los Riscos de Famara (Lanzarote,
Islas Canarias) Breve
descripción y Guía florística
Lanzarote y sus riscos del
noroeste han sido investigados
por numerosos botánicos, entre
los cuales, por su línea
generalizada, destacan S.
Berthelot (1837), H. Christ
(1888), C. Bolle (1893), J.
Pitard & L. Proust (1908), L.
Lindinger (1926), 0. Burchard
(1929), K. Lems (1960), J. Lid
(1968) y A. Kahne (1968). A.
Engler (1910) también informó
sobre la vegetación en general,
mientras que la parte
sistemática esencial (nuevas
especies) fue publicada por P.
B. Webb & S. Berthelot (entre
1836 y 1850).
Una segunda ola de
investigaciones florísticas se
inició con E. R. Sventenius
(1960, 1968), seguido por D.
Bramwell (1970), G. Kunkel
(1970-77), K. Lems & C. M.
Holzapfel (1968-71) y P. Sunding
(1970-71). Otros estudios están
pendientes de su debida
publicación. Es de lamentar que
aún no se haya editado un
registro de todas las
publicaciones que tratan la
flora y vegetación de la isla de
Lanzarote en su conjunto.
Debido a las condiciones de
aridez estival y quizá también
debido al pastoreo frecuente, la
vegetación de estos Riscos de
Famara no es exuberante. Eso se
refiere a la densidad de la capa
vegetal en sí; el número de
especies, sin embargo, ya a
primera vista, sobrepasa lo
esperado. A la lista de las,
aproximadamente, 230 especies de
plantas de flor, habrá que
añadir algunos helechos (Notholaena
vellea, Asplenium onopteris y
Ophioglossum azoricum) y
numerosos musgos y líquenes. El
número de especies de la última
clase mencionada probablemente
es superior a cien, incluyendo
varias Roccella (la «Orchilla»),
que son plantas económicamente
interesantes.
Confiándonos en algunos
investigadores del siglo pasado
(por ejemplo Webb & Berthelot
(1), C. Bolle (2) y A. Engler),
los Riscos de Famara tenían sus
vestigios de laurisilva. Son
tres especies arbóreas que
fueron observadas: Laurus
azorica (el Laurel), Myrica faya
(la Faya) y Erica arborea (el
Brezo); las tres especies
citadas han sido exterminadas en
la isla hace quizá unos cien
años. Quedan aún algunas
especies acompañantes, típicas
de riscos de dicha formación,
como Bupleurum handiense, Con volvulus
lopezsocasi, Rubia angustifolia,
etcétera. Los hallazgos de
Maytenus senegalensis, Olea
europaea, Phillyrea latifolia y
Pistacia lentiscus, en caso de
que no se trate de
introducciones casuales, pueden
indicar la existencia también de
una especie de formación de
esclerófilos en la misma zona.
Resumiendo lo ya dicho y con
referencia a la enumeración que
sigue a estas líneas, podemos
decir que este sector noroeste
de la isla de Lanzarote es el
botánicamente más interesante y
que merece consideración, tanto
desde el punto de vista de
nuevas investigaciones como —sobre
todo— de conservación, ya que el
conjunto de la vegetación ha
sufrido al menos tres bajas y
que son bastantes las especies
que se registran como rarísimas.
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(1) Webb & Berthelot (Phytogr.
111/1:14), Erice arborea: «In
insulá planiore Lanccrottá
verticem jugi Peñitas de Chane
sestil...».
(2) C. Bolle (Bot. Rüekblicke
etcétera, p. 230/231): «Noch
mein seliger Freund, Consul
Berthelot, sah auf den Höhen von
Lanzarote die massigen Stiimpfe
uralter Lorbeern...», y, «Kann
dies nicht nade der Höhe der
jetzigen Hermita de las Nieves,
auf oder an den Peñitas de
Chache, der nun verschwundene,
doch wohl beglaubigre Forst von
Lorbeern und Hayas (Myrica
faya)gewesen sein?»
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