HISTORIA / Datos históricos


 

Fuente: Programa Fiesta San Juan 1997


La isla de Lanzarote fue conquistada por las huestes al mando del normando D. Juan de Bethencourt, en el año 1402, sin que apenas ofreciera resistencia la pequeña y mermada población autóctona, ya que los guanches no estaban preparados para resistir un ataque organizado, resultando un paseo militar y reduciendo al último rey isleño, Guadarfia, obligándosele a ser  bautizado ante el conquistador.

Antes y más aún en la propia conquista y después de ella, la población guanche fue sometida y reducida a las mayores vejaciones, dominándoles de forma tal que pasaron a ser esclavos de los conquistadores, piratas, saqueadores y otros, sacándolos de su propio "hábitat" y modificándoles las costumbres de su civilización ancestral, anclada por cierto en la edad de piedra, no conociendo los metales, pero ellos tenían su propia forma de vida y les fue alterada a la fuerza.

Si nos situamos en la actualidad, parece que hablar de los guanches es como referirse a otra gente muy antigua de la que ya no queda rastro y con la que nosotros no tenemos nada que ver, pero eso no es cierto porque la mayoría de los habitantes de nuestras islas lleva en sus venas alguna gotita de sangre guanche, la cual se ha visto muy alterado por la proliferación de mezclas de gentes de fuera; pero que si miramos sobre alguien que tuviera algún antepasado del anterior siglo, que fuera nativo de estas tierras, de seguro que llevará alguna señal guanche en su sangre.

Precisamente nuestra isla es la menos que conservan la raza guanche, por ser la más cercana a la llegada de los conquistadores, piratas y saqueadores, y más propicia al ataque. Es en las islas occidentales del archipiélago, donde más se conserva la sangre guanche y más La Gomera y El Hierro.

Hay muchas consideraciones y versiones respecto al nombre del actual pueblo y Municipio de Haría, pero lo que está claro es que se trata de un nombre  impuesto por los conquistadores ya que antes no existía y sólo habían unos pequeños asentamientos que tenían nombres autóctonos, algunos de los cuales aunque deformados en su léxico pueden considerarse asimilados con la toponimia guanche. Después de la conquista parece que el primer nombre del pueblo de Haría fue FARIA, que luego fue degenerando en ARIA y otros y más tarde en HARIA.

Por otra parte digamos que en siglos pasados Haría fue el segundo pueblo de la isla en orden de importancia, después de Teguise, siendo el primero que consiguió una delegación religiosa dependiente de la Iglesia Central de Teguise, que luego sería Parroquia, comenzando en la actual Ermita de San Juan, con diversas reformas y construyéndose más tarde y terminándose en el año de 1630, el hermoso Templo Parroquial que perdimos en el año 1962 con el desgraciado y desafortunado derribo, ya que entonces la conservación del patrimonio histórico-arquitectónico apenas tenía importancia. Lo nuevo era lo más bonito y lo viejo se despreciaba.

Hasta la promulgación de la Constitución de 1812, por las Cortes de Cádiz, conocida por "La Pepa", no se habían establecido los Municipios, existiendo sólo pueblos, que se regían en esta isla, por el Cabildo de Lanzarote, con sede en Teguise como capital de la isla hasta 1850, con Alcaldes Reales y Pedáneos, naciendo a partir de ella, la creación de los siete, antes ocho, Municipios de la isla.