Historia / Referencias históricas
Fuente: La Hoja del Municipio de Haría nº 506
El Municipio de Haría, tuvo una persona muy conocedora y entusiasta del fútbol, desde que llegara a Haría como Párroco, Don Juan Arocha Ayala, procedente de Ingenio, nativo de La Antigua, de Fuerteventura, coincidiendo con la llegada de soldados en la posguerra de 1940 a 1945, que algunos eran conocedores de este deporte, inyectando a la afición de Haría una buena dosis de animación, y se pueden recodar los equipos denominados El Zeppelín, El Caimán, El Aviación y finalmente a principios de los años de 1950, el denominado Juvenil, después de una época bastante fría después de la marcha de los soldados, y recordamos a algunos practicantes de este deporte, a Manuel Pérez Santana, Francisco García Gilabert, Andrés Betancor Bonilla, Román Betancor Rodríguez, Jesús Barreto Martínez, Juan-Francisco Rijo Betancor, y otros.
Pero fue a principios de los años de 1953, cuando Pancho el Cubano, Ginés Betancor Pérez, y Félix Martín de León, compraron en junto, un balón en la tienda de Antonia la del Puente, cuando estaban esperando que llegara Antonio Mesa Cedrés, de Arrecife, para dar sesión de cine en Haría, y no llegó por avería del coche en carretera.
Con ese balón empezaron a dar balonazos primero en la era de Antonio Betancor Villalba y otros espacios, pero Pancho el Cubano, principal entusiasta, se rodeó de buen número de jóvenes de Máguez, ideando que había que contar con un campo de fútbol en Máguez, teniendo como principal objetivo, el enfrentarse al equipo Juvenil de Haría.
El equipo de Máguez, tuvo como primera sede, la Sociedad de Máguez, alquilando luego un local en la Plaza, a Segundo Ramírez Figueroa, en 28-08-1953.
Primero se competía en Haría, en unas gavias de Salvador Perdomo López, hasta que el equipo de Máguez, con el nombre de Unión Deportiva Máguez, arrendara un terreno para campo en la Vega de Máguez, a Doña Carmen Valenciano Curbelo.
En la fiesta de San Juan de 1953, en Haría, se llevó a cabo un encuentro extraordinario, en que fue ofrecida ante el Cura Don Juan Arocha, la designación de Madrinas y Damas de Honor, siendo la Madrina del Equipo "Juvenil de Haría", Catalina (Nina) Rodríguez González, siendo Damas de Honor, María de los Ángeles Cabrera Betancor, y Josefa Pérez Núñez, y por el Equipo "Unión Deportiva de Máguez", fue designada Madrina, Olga (Olguita) Borges Barreto, y siendo Damas de Honor, Victoria Luzardo Barreto y María del Carmen Betancor Mesa. Hay fotos de ello.
El árbitro de este encuentro histórico de fútbol, fue el vecino Román Betancor Rodríguez, que fuera al tiempo entonces, un buen futbolista y un buen luchador.
En Máguez luego surgió otro equipo "El Cometa" y la "Escoria", para Haría y Máguez, y surgieron además, cuatro equipos juveniles en Máguez y dos en Haría.
Tuvo gran trascendencia esta época, hasta el punto de que los jugadores salieron en estampitas en las cajetillas de Cigarrillos 46 al menos, en su etapa hasta 1957.
También es un referente importante, el hecho de que, habiendo entonces una gran afición por la lucha canaria, y también por ir al cine, el fútbol acabó con la afición a la lucha, y acabó con la afición al cine, cerrando las puertas Antonio Mesa Cedrés.