IGLESIA: -- Datos de interés
(Base datos Dña. Paqui Perera)
HARÍA representa un núcleo de cristiandad muy antiguo, constando al menos desde 1.561, como Ayuda de Parroquia.
El primer templo fue dedicado a la advocación de Nuestra Señora de la Encarnación, y responde en su ubicación a la actual Ermita de San Juan.
En el año de 1.618, la isla de Lanzarote sufre la devastadora incursión de Tabac y Slimán.
La Iglesia de Haría fue gravemente dañada por dicho ataque de piratería y se decidió llevar a cabo su reconstrucción en otro lugar, concretamente en la Plaza de Haría, donde hoy se encuentra el Templo de Nuestra Señora de la Encarnación.
El día 12 de Agosto de 1.625, Don Manuel de Acuña Figueredo y su esposa Doña Catalina Rodríguez, vecinos de Haría, piden al Visitador Eclesiástico Don Juan Pérez Criado, techar y poner puerta a la antigua Iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación por haberse trasladado de lugar, con licencia del Obispo Don Antonio Corrionero (Obispo de Canarias de 1.614 a 1.621).
La Iglesia vieja quedó desmantelada desde la incursión berberisca, habiendo sido construida por el padre de Doña Catalina Rodríguez, Don Luis Rodríguez.
Desde el antiguo templo fué asaltado, los animales entraban en el mismo, aún cuando estaban enterrados todos los que murieron en el tiempo en que se halló en activo.
Don Manuel de Acuña Figueredo y su esposa Doña Catalina Rodríguez, solicitan además, que la antigua Iglesia se ponga bajo la advocación de San Juan Bautista. Existía en el primer templo un altar dedicado a dicho Santo, construido hacia 1.572 por Doña Francisca Ramírez.
El Patronato de la Iglesia de San Juan, pasó a la hija de D. Manuel de Acuña Figueredo, Doña Ana de Acuña Rodríguez y solicitaron en 1.678 reedificar la Iglesia, porque se encontraba en mal estado. Desde 1.724, los hijos de Doña Ana de Acuña y Don Cristóbal de la Torre, aparecen como mayordomos, y en 1.773, también sus nietos.
OTROS ANTECEDENTES:
ESCULTURA DE LA IMAGEN DE SAN JUAN BAUTISTA, de autor anónimo, del siglo XVII, en bulto redondo de madera. Don Manuel de Acuña Figueredo y su esposa Doña Catalina Rodríguez, vecinos de Haría, piden reparar la que fuera la primitiva Iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación, destruida en la incursión berberisca de 1.618, y piden titularla bajo la advocación de San Juan Bautista.
En 1.753 se retoca la imagen.
En las cuentas de 1.782 se descargan 387 reales a Antonio el organista, oficial de pintor, quien había sido vecino de Tiagua, por el retoque y composición de la imagen de San Juan.
RETABLO DE SAN JUAN BAUTISTA, de autor anónimo, de madera policromada, con ubicación en la propia Iglesia de San Juan de Haría. En una Visita de 28 de Mayo de 1.753, se ordena levantar un retablo y tarima. Aún en 1.773 está sin construir y desde 1.784 se inicia la compra de material. En las cuentas de 1.792 a 1.800 se registra el costo de las obras, que posiblemente fuera muy modesto ya que sólo aplican 41 reales y 8,5 maravedíes por dar yeso al retablo, pintar el atril y la puerta de la sacristía.
En Noviembre de 1.918 se inventaría un retablo de un nicho nuevo.
Colaboración del ARCHIVO DE TEGUISE