Los dos tipos arquitectónicos que vamos a destacar son:
A) La arquitectura señorial, caracterizada por el mayor desarrollo del número de estancias, destacando la sala, como pieza distintiva. Este modelo organiza las habitaciones en torno a un patio interior con galería, acristalada o abierta, con techos planos de madera compuestos por vigas y tablazones machihembrados; además, proliferan los dormitorios, una amplia cocina dotada de mesa para servicio diario, comedor, patios y traspatios, poseyendo dependencias anexas para labores agrícolas y ganaderas. Este tipo de inmuebles pasaba por herencias generacionales sucesivas, conservándose en manos de la misma familia por largo tiempo; de ahí que, en muchos casos, se haya podido reflejar la evolución histórica constatando la genealogía familiar.
B) La arquitectura popular, cuyas edificaciones son el referente de una economía estrictamente agraria, construcciones que surgen en espacios aislados, con planta sencilla y dotadas de dependencias más exiguas, pero con características personales muy marcadas, fruto del desarrollo de estructuras modulares, organizadas en torno a un patio exterior, que desempeñaba diferentes funciones, sirviendo de era y recogida de agua. Se ubicaba además el aljibe. Presentan formas de L o de U, esta última proveniente de influencia portuguesa, según apunta la doctora Carmen Fraga. Estas formas posibilitaban la expansión a medida que se hacía necesario, con techos con poco uso de madera, cubiertos con ripia. En ocasiones se empleaban pequeñas piedras volcánicas y sobre esto se colocaba la torta.
Elementos como hornos, patios traseros, cobertizos para animales y todo lo que constituye un factor necesario e integrante de una economía de subsistencia conforman este tipo de arquitectura.
En ambos ejemplos predominan más las construcciones de techumbre plana, aunque hubo bellos ejemplos de techumbres a dos y cuatro vertientes, conservándose aisladamente algunos vestigios.
La arquitectura se desarrolla de forma orgánica, con plantas cuadradas o rectangulares, con patio donde convergen las habitaciones.
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