PUEBLOS -
Punta Mujeres
REFERENCIAS AÑOS 1950 A 1970
Las Salinas de Punta Mujeres, que tuvieron un gran auge hasta la década de 1950, su negocio fue decayendo a partir de los años de 1960, al comenzar las fábricas de hielo, y el propio Don Ventura Acuña Quintero, ya comenzó a vender sus primeros solares en esta década, y la gente se quejaba de que las Calles se habían marcado muy estrechas, y de hecho no podían pasar bien los coches, y también se vendieron solares en la orilla del mar, y los vendedores querían venderlos a ser posible a marea vacía, exagerando un poco, pero fue saliendo y corrigiéndose, y los compradores no compraban lo que pertenecía a la orilla del mar.
A finales de la década de 1950, ya fue tan grande el deterioro o bajada de los precios en la sal, que ya este negocio no era rentable, como pasaba en todos sitios, de forma generalizada, y ello hasta el punto de que los dueños decidieron vender el territorio de Las Salinas, perdiéndose así una de las riquezas más importantes del entorno, y cometiéndose con ello un atentado a la historia y la cultura, además de la arqueología y arquitectura, pero la ruina en el sector era evidente.
Pero la verdad es que a partir de 1960, ya se empezaba a vislumbrar un mayor movimiento en Punta Mujeres, coincidiendo con el comienzo del turismo, y así se empezaron a comprarse solares y empezó de verdad la construcción de muchas casitas terreras, muy sencillas, con un aljibe tan pequeño que sólo tenían un metro de altura, y se guindaba con un cacharro, y se buscaban los albañiles donde quiera que estuvieran, y siendo los promotores de estas segundas viviendas, gente de Máguez, especialmente, y también de Haría y resto del Municipio de Haría.
Al principio de los años de 1960, hubo ventas de solares hechas por Don Ventura Acuña Quintero, Doña Catalina Hernández Perdomo, Don Dámaso González Núñez, Doña Mercedes Socas Betancor, y más tarde Don Antonio López Socas, habiendo también el médico Don José Antonio Hernández Barreto, pero en los años de 1980, proliferó la venta de solares de Doña Nieves Ramírez Curbelo y su esposo Don Jesús López Socas, en dos etapas seguidas, que dieron motivo a la creación de dos barrios que se distinguen con sus nombres, al Naciente de Punta Mujeres, así como también Don Manuel García Negrín, conocido por El Gomero, de la finca que fue de Don Carlos Luzardo Ramírez, donde éste tenía su casa histórica, que desapareció. También intervino Don Eusebio Romero García en algunas ventas de solares, viniendo luego en esta misma década, la venta de solares de las Salinas, que resultó muy importante, con Don Antonio Cabrera Lemes y un socio alemán, que donaron el solar para construirse la Ermita de Nuestra Señora del Pino.
También estuvieron metidos en la venta de solares del “Cercado de Los Rosas”, Don Francisco Rosa Torres, Don Juan Rosa Betancor, Don José Berenguer Rico, Don Gilberto Perdomo Camejo y otros, como herederos de la finca principal.
Desde finales de los años de 1960, y más bien en principios de la década de 1970, ya se intentaba hacer algunas fiestas para divertimento de la gente, y se hacían verbenas donde hubiera espacio solar y se pudiera. Estas celebraciones fueron progresando y se hacían verbenas a mayor escala en varios sitios del pueblo. Estas fiestas eran sencillas y a nivel de pueblo, y todavía se recuerda, después de tantos años, las intervenciones del animador de estas fiestas, que era Don Julián Dorta Méndez, pionero a nivel callejero de estas fiestas, en los años de 1970 y 1980, que le daba un calor especial a las fiestas con su voz y su altavoz. También se celebraron unas buenas verbenas en la propiedad de Manuel Santacruz Socas, Palenque, además de juego de bolas, y su bar, aparte de otras atracciones. También organizaron verbenas Don Juan Martín Alfonso y Don José Manuel Morales Dorta.
Pero también, desde el comienzo de las fiestas en la década de 1960, Doña Eugenia González Luzardo, siempre fue una gran colaboradora y animadora, en estas fiestas, y fue la Encargada de preparar los muñecos en la “Quema de la Pareja de Costeros”, desde el principio, lo que ha venido haciendo hasta la actualidad, de una forma totalmente desinteresada, así que es algo para tener muy en cuenta.
De Punta Mujeres, se puede decir que fue desde los primeros años de 1960, un pueblo solidario, y cuando entonces no habían coches y apenas alguna moto, el que podía echaba una mano a los demás para acudir a asistencia médica y así colaboró Don Pedro Perdomo Socas y otros, y Don Domingo Valenciano del Castillo también echaba una mano en estos menesteres, y además ponía inyecciones, aparte de otros favores.
De Punta Mujeres, también hay un referente ya histórico, en el sentido de que el que fuera muchos años Presidente del Cabildo, Don José Ramírez Cerdá, en las décadas de 1960 y 1970, venía con frecuencia a Punta Mujeres a pescar, y le esperaban Don Regino Barrios Villalba y también Don Juan Santana de León, para acompañarle.
Se recuerda como anécdota de Punta Mujeres, de sus primeros años de 1960, cuando el que estuviera muchos años en Argentina, Don Zenón Pérez González, procedía a asar unos cochinitos al estilo argentino, con una paciencia de muchas horas.