PUEBLOS / Arrieta

 

 

Fuente: Diario de Las Palmas

07-10-1972

Por  Enrique

 

Se va a arreglar el muelle de Arrieta ¿pero cuándo?

 

Arrieta es un pequeño  y tranquilo puerto del norte de Lanzarote poblado por pescadores y al que en la época estival acuden un contingente elevado de veraneantes.

Fue, hace ya un buen puñado de años, puerto  comercial de primera magnitud a escala insular empero con el devenir del tiempo y con el crecimiento demográfico e industrial de otras zonas perdió importancia hasta que un buen día Grupo de Puertos, entregó la posesión del muelle al Ayuntamiento de Haría.

El mar en su lucha continuada. El olvido más inmisericorde y el transcurso de los años han ido minando la fortaleza de este  pequeño embarcadero hasta dejarle ya en una situación ciertamente desesperada. Enorme socavones en su superficie y profunda hendiduras a lo largo de la parte sumergida en el agua, muros derruidos etc., etc., forman el conjunto de la panorámica contemplativa que se le ofrece al nativo y naturalmente que al foráneo. Día adía sus muros pierden consistencia y se nos antoja que es peligroso andar sobre su lomo. La visión de lo que queda de ayer —poco y mal cuidado— dejan en el alma una irreprimible sensación de angustia a la par que nace un deseo profundo devolver la mirada hacia lugares más propicios, sí porque se nos presenta como el signo más patente de la regresión.

Se nos ha dicho, varias veces, que se acondicionará debidamente empero novemos que se produzca el milagro y mientras llega o no la mano amiga el anciano y decrépito muelle marcha camino de la tumba en irremisible carrera hacia las profundidades marinas en donde descansará por los siglos.

Volvemos sobre nuestros pasos y nos tropezamos con unos marinos viejos que observan al condenado mientras unas olas furiosas invaden la superficie y suspiran tristemente. ¿Recuerdan el ayer? No lo quisimos saber y marchamos, empero ¡Oh! sorpresa a la salida del pueblo vemos un compacto grupo de bungalows que anuncia la llegada próxima del turismo. Sarcástica realidad. El turismo parece ha de llegar para vivir cara al mar en busca de  tranquilidad y de satisfacciones marinas. Lo primero es fácil de conseguir al igual que playas y sol y los deportes marinos ¿Qué? Bueno a lo peor cuando ya no quede rastro de muelle de referencia a alguien se le ocurrirá la idea de dotar al lugar de un puerto deportivo porque puede ser una motivación más de atracción para los foráneos.

¿Se espera eso? Lamentable porque el desembolso sería mayor y el tiempo invertido mucho y muy valioso también. En fin que entre promesas y más cosas la situación sigue siendo igual, perdón, peor que hace algún tiempo, años, cuando nos ocupamos por vez primera de esta cuestión.